Mejorando el acceso a oportunidades tanto en mujeres como en hombres, obtenemos resultados positivos que promueven un mejor nivel de empoderamiento y una visibilidad equilibrada de los roles en las cadenas de valor.
El uso adecuado del lenguaje inclusivo permite la ruptura de las nociones sexistas y patriarcales reforzadas habitualmente por el lenguaje no inclusivo.